Yo empecé la desparasitación solo porque me lo recomendaron, sin muchas expectativas. Tenía un problema en la piel que no se iba con nada, y aunque no pensé que tuviera relación, igual me animé a probar con la trementina. A los pocos días, empecé a sentirme más vital, más liviana. Mi piel empezó a mejorar… y también noté algo muy extraño: el cuerpo empezó a eliminar cosas que parecían restos de comida, pero que yo no había comido. Pieles parecidas a las del tomate, bolitas como lentejas rojas, algo parecido al sésamo... pero nada de eso formaba parte de mi dieta. Consultando con Patricia y buscando información, entendí lo que estaba pasando: estaba expulsando parásitos. Y no era la única. Muchas personas estaban viviendo lo mismo. Desde que empecé, mi cuerpo cambió completamente. Me siento limpia, con energía y sigo el proceso porque sé que todavía hay más que eliminar. Estoy profundamente agradecida con Patricia, no solo por su conocimiento, sino por su acompañamiento constante. Gracias a ella hoy me siento más viva que nunca.
Leonor Martinez